Los beneficios de incorporar el jengibre a tu dieta

Si eres amante de los sabores cítricos y frescos, no puede faltar el jengibre en tu despensa. Se trata de un superalimento aún desconocido en muchas cocinas, pero su consumo tiene grandes beneficios para la salud. Es un gran aliado como antiinflamatorio y analgésico, además de ayudar a regular los niveles de azúcar en sangre. Si quieres incorporar este alimento a tu dieta, hoy te presentamos sus beneficios y algunas ideas para utilizarlo.

Hay alimentos que se vuelven básicos de cocina por los beneficios que tienen en el organismo y el jengibre los encabeza. La raíz del jengibre es ampliamente conocida por sus propiedades medicinales y se puede usar tanto fresca, como en polvo.

Trata las náuseas y el malestar estomacal

Si sufres digestiones pesadas, tienes náuseas o has comido de más en alguna reunión, el jengibre se convertirá en tu salvavidas. Puedes tomarlo como infusión y notarás sus propiedades antiinflamatorias y calmantes. Aliviarás las molestias de una manera natural, saludable y sencilla, además, su frescor te ayudará a dejar atrás el mal sabor de boca.

Ayuda a aliviar la inflamación

La inflamación es un proceso natural que todos hemos tenido que sufrir en algún que otro momento. Se trata de una respuesta autoinmune frente a una lesión o infección en el cuerpo y muchas veces se relaciona estrechamente con el dolor o la incomodidad. El jengibre puede ser un remedio natural de gran utilidad para aliviar la zona inflamada, sobre todo si se trata de procesos digestivos o molestias respiratorias.

Además, se complementa con su acción analgésica para conseguir una mejora de los síntomas en quien lo consume. Puede ser especialmente útil para tratar dolores menstruales, catarros o cefaleas de manera natural.

Regula los niveles de azúcar en sangre

El jengibre puede ayudar a regular y estabilizar los niveles de azúcar en sangre, una patología que puede tener consecuencias como la diabetes a largo plazo. Se evitan los picos de azúcar de manera natural y puede ser un gran soporte a una dieta saludable y equilibrada.

Si ya sufres de una patología medicada relacionada con los niveles de azúcar en sangre, te recomendamos hablar con tu médico, para que tenga en cuenta el consumo de este superalimento en tu dieta.

Reduce los niveles de colesterol

Un colesterol en niveles elevados, puede promover el desarrollo de enfermedades cardiovasculares, todos lo sabemos. Pues bien, el jengibre tiene la capacidad de disminuir los niveles de colesterol y triglicéridos naturalmente. Es esencial incluirlo en la dieta de manera continuada para poder notar sus beneficios, pero puede ser una manera deliciosa de mantener controlados los niveles.

Se recomienda consultar su consumo con un especialista si ya sufres de esta patología, así podrá darte unas indicaciones personalizadas según tu medicación y dieta.

Evita las infecciones

Si eres propenso a sufrir infecciones bacterianas o por hongos, no puedes dejar de incluir este alimento en tu menú semanal. Sus propiedades antioxidantes lo convierten en un gran aliado contra infecciones del tracto urinario, neumonía y otras enfermedades respiratorias.

Te ayudará a aliviar los síntomas en caso de sufrir una infección y a bloquear el crecimiento de las bacterias si aún se encuentra en fases iniciales. Un remedio natural que complementará de maravilla los efectos de la medicación y te ayudará a sentirte mejor durante todo el proceso.

¿Cómo incluir el jengibre en nuestra dieta?

Después de conocer todas sus bondades, seguro que ya estás apuntando el jengibre a la lista de la compra. Para nosotros ya es un básico que compramos todas las semanas, aquí te mostramos algunas formas sencillas y deliciosas de incorporarlo a tu dieta.

• Infusiones: Si eres de té e infusiones, puedes apostar por el consumo de té de jengibre o comprar una inclusión que lo contenga. Normalmente, se encuentra combinado con el limón para conseguir un toque fresco o con la miel, para añadir un toque dulzón a la bebida.

• Especia: Nada mejor que un sabor intenso y singular para preparar recetas para chuparse los dedos. Puedes comprarlo natural y rallarlo o en polvo, de ambas maneras dejará un sabor increíble en tus platos. Te recomendamos combinarlo con limón en pescados y carnes o condimentar un buen curry de verduras cuando te apetezca un plato acogedor.

• Sopas y purés: Si el sabor picante y fresco del jengibre aún no acaba de encajar con tu paladar, te recomendamos incorporar un trozo en sopas y purés. El sabor pasará desapercibido y podrás disfrutar de todos sus beneficios en tus platos favoritos.

• Salteado de verduras: Si el picante es lo tuyo, añádelo en salteados de verduras para triunfar. Su toque cítrico y potente llevará tus recetas al siguiente nivel y seguro que conquistas a más de un paladar con su crujiente. También puedes añadirlo rallado o en polvo, versiones más ligeras y menos intensas.

• Productos cosméticos: El jengibre también ha contado con mucha fama en la historia por su uso como cosmético. A día de hoy puedes encontrar geles y cremas que lo incorporan para que puedas notar su frescor y acción calmante en tu propia piel.

¿Cómo conservar el jengibre fresco?

Comprar el jengibre fresco es garantía de éxito si quieres disfrutar de todas sus propiedades, pero aprender a conservarlo es clave para conseguirlo. Lo mejor es guardarlo en la nevera sin pelar, cubierto con papel absorbente de cocina para evitar el exceso de humedad. Si cuentas con una bolsa con cierre hermético, podrás alargar su vida útil durante varios meses.

También puedes congelarlo e ir sacando según necesidad, lo mejor será cortarlo en trozos y guardarlo en una bolsa para congelador. Podrás rallarlo una vez descongelado, sin embargo, evita descongelarlo y volverlo a congelar después para evitar que se deteriore.

Con todos estos trucos, lo tendrás más que sencillo para poder incorporar el jengibre a tus mejores platos. Una vez notes sus beneficios, no dejarás que descanse un día en la despensa, así que no dudes en hacerte con él en tu próxima vista al supermercado.